Salte de esa agencia tan pronto como puedas

 

Si eres una persona talentosa, trabajadora y con buena actitud; si te importa estar orgulloso de tu trabajo y hacer crecer a los demás; si tienes toda la intención y la capacidad para lograrlo, te recomiendo que te salgas de esa agencia.

 

Salte si no te dan prestaciones, si el ambiente de trabajo es tóxico, si tus ideas no son tomadas en cuenta, si no ves cómo podrías crecer profesionalmente, personalmente y financieramente.

 

Salte de esa agencia si los problemas sólo se resuelven con regaños, si no hay un ambiente colaborativo o si en tu equipo nunca hay un jefe o alguien con experiencia que te haga crecer. Salte si cada vez que un cliente cuestiona tu trabajo, la única solución es cambiarlo, no defenderlo.

 

Salte si no eres parte de la conversación para mejorar tu entorno inmediato: tu equipo, tu departamento. Salte de esa agencia si sólo hay espacio para trabajar y no para innovar. Si no hay un organigrama ni responsabilidades definidas, no esperes más.

 

Si la agencia invierte mucho en mantener a los clientes contentos y muy poco en mantener a su equipo motivado y recompensado, salte. Si repercute negativamente en tu calidad de vida, salte. Si el trabajo no te deja cuando llegas a la casa. Si el trabajo no te permite disfrutar tu trabajo…

 

Salte de esa agencia apenas puedas, encuentra una mejor y si no está en tu ciudad, múdate. Por cierto, si tu agencia no tiene una visión internacional, salte.

 

Pero salte ya, porque la vida es demasiado corta para estar en el trabajo equivocado. Tu biografía es mucho más que tu currículum.

 

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Y, por cierto, si quieres darle la oportunidad a otra agencia… estamos contratando.